El espacio cuenta con adaptaciones en sonido e iluminación para que estas personas puedan vivir una experiencia única
«¡Vinimos al cine!», celebra María Antonia Díaz al ingresar junto con su hijo Alfonso, diagnosticado con autismo, a una sala de cine en Caracas, el primer espacio adaptado para las personas con esta condición en Venezuela.
Esta madre de 44 años se emociona porque consiguió un espacio recreativo para su hijo de ocho años. «Para los papás de niños con autismo tener que salir a sitios (…) a veces es muy complicado», señala antes de la proyección de «Supermascotas», de la compañía Warner.
La sala se estrenó esta semana y ofrecerá películas previamente estudiadas por especialistas que evaluarán si el contenido es apto, pues escenas muy violentas o de terror pueden causar irritaciones
La sala cuenta con adaptaciones en sonido e iluminación, debido a que ruidos estruendosos, colores muy llamativos o muy oscuros causan alteraciones en esta comunidad. Además tiene una pantalla con una iluminación tenue y un audio moderado. También hay pictogramas para que los espectadores sepan qué hacer o hacia dónde dirigirse.
Por si fuera poco, fue diseñada una «zona de seguridad» para aislar o calmar a algún asistente en caso de una crisis.
Es el primer espacio recreativo «realmente» adaptado para personas con autismo y síndrome de Down, señalan las organizaciones promotoras de esta iniciativa, Fundación Asperger de Venezuela (Fundasperven) y Asodeco, ambas dedicadas a la inclusión de las personas con discapacidad intelectual.
«Nuestras personas con discapacidad tienen que ir a lugares que no están adaptados a sus necesidades y (…) Cinex preparó a su personal para tratar a estas personas», destacó en rueda de prensa la presidenta de Asodeco, Sonia Rojas.
En Venezuela rigen leyes que prohíben la discriminación o exclusión de las personas con discapacidad. Es norma dar prioridad de atención a estos grupos y exonerarlos de una parte del pago de entradas a sitios públicos.
Fuente : Linda Rodriguez