La pelea entre la Alianza Verde y el petrismo podría llevar a una ruptura en la coalición.
El Pacto Histórico y la Alianza Verde, los principales aliados del presidente Gustavo Petro en la coalición de Gobierno, están protagonizando la gran pelea política de 2023. Las relaciones pasan por su peor momento y ya ha empezado a rondar el ‘fantasma’ del rompimiento en las fuerzas de Gobierno.
Lo que se dio inicialmente como una discusión por diferencias, a finales del año pasado, frente a temas centrales de la reforma política, como las listas cerradas y el voto obligatorio, ha ido escalando a tal punto que ya se empezó a hablar de que la Alianza Verde podría llegar a perder la presidencia del Senado y de la Cámara, dignidades que le corresponde en las próximas legislaturas.
Según los acuerdos a los que llegaron los partidos antes de la instalación del actual Congreso, a la Alianza Verde le correspondería la presidencia del Senado en la segunda legislatura, es decir, entre el 20 de julio de 2023 y el 20 de julio de 2024, y la presidencia de la Cámara en la tercera legislatura, de julio de 2024 a julio de 2025.
Sin embargo, desde el Pacto Histórico ya se ha empezado a insinuar que los verdes se marginan de la coalición de gobierno, como lo han pedido algunos sectores de la colectividad, es posible que los acuerdos entre las fuerzas políticas se rompan, lo que no aseguraría el apoyo del peronismo a los verdes.
Tener la presidencia del Senado o la Cámara es uno de los mayores deseos de los partidos, pues quien ostente esta dignidad puede decidir sobre el manejo que se le da a la agenda legislativa, qué proyecto se engavetan o a cuáles se les mete el acelerador. Además, ambas corporaciones tienen un importante margen de contratación.
Ante las insinuaciones que han salido del Pacto Histórico de que si los verdes no apoyan la agenda del Gobierno podría peligrar su llegada a las presidencias de Senado y Cámara, la representante Katherine Miranda, una de las voces con mayor ascendencia en la Alianza Verde, se fue de frente contra el petrismo y los acusó de chantaje.
“No acepto que me pongan entre la espada y la pared y me chantajeen con la Presidencia de la Cámara”, apuntó Miranda desde su cuenta de Twitter.
Y luego lanzó una dura sentencia: “Los puestos van y vienen, los principios y la dignidad no”.
Más leña al fuego
La molestia en la Alianza Verde ha aumentado en las últimas horas por cuenta de la posibilidad que planteó el actual presidente del Senado y líder del Pacto Histórico en el Congreso, Roy Barreras, quien le ha pedido a los verdes que si aspiran a presidir el Legislativo, deben votar a favor las iniciativas del Gobierno.
“La Coalición Alianza Verde tiene una responsabilidad con el cambio que se hace indispensable al aspirar a presidir el próximo Congreso”, apuntó Barreras, quien no hizo más que echarle leña al fuego en medio de este duro pulso.
El presidente del Congreso ya se había referido al tema a finales del año pasado, cuando, nuevamente, ligó el apoyo irrestricto de la Alianza Verde a la reforma política y los proyectos de Gobierno con la posibilidad de que puedan presidir el Senado.
“Por ser partido de gobierno está previsto que ese partido presida el Senado en el segundo periodo. Tienen toda la posibilidad de dejar de serlo, pero me parece inconcebible que puedan renunciar a la oportunidad de liderar las agendas del cambio en el segundo año”, afirmó Barreras.
El duro pulso que se libra entre estas fuerzas políticas podría no solo generar una ruptura en la coalición sino que pone en riesgo la aprobación de la reforma política, proyecto clave para el Gobierno Petro.
Fuente : El Tiempo , Johan López
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