Cualquier movimiento de algún mecanismo militar en el mundo prenderá las alarmas.
La guerra en Ucrania, las tensiones en Asia entre Corea del Norte y Corea del Sur, más la problemática entre China y Taiwán tienen al mundo en vilo.
Ejercicios militares, movilización de tropas y anuncios de gobiernos apoyando a otros países preocupan cada vez más a la comunidad internacional y hacen creer que en cualquier momento pueda iniciar una nueva guerra mundial, y peor aun, un conflicto bélico con armas nucleares de por medio.
Es por eso que la llegada de un submarino nuclear a territorio europeo prendió las alarmas, esta vez, por parte de un grupo de ambientalistas. Verdemar-Ecologistas en Acción advirtió este martes primero de noviembre la llegada a Gibraltar de un submarino nuclear de los Estados Unidos de la clase Ohio, que “pone en peligro a las poblaciones del Campo de Gibraltar y del Estrecho”.
Desde el grupo ecologista, señalan en un comunicado que la llegada debería haber conllevado la activación del plan de Emergencia nuclear y de los Grupos de Vigilancia Radiológica Ambiental de la Armada (Grova) por el riesgo que supone para la población.
Sobre estos submarinos, que consideran “bombas flotantes”, advierten que “no es la primera vez que en la base militar de Gibraltar” atracan averiados y se han hecho reparaciones “sin ninguna medida de seguridad”.
De hecho, aseguran que desde que se reparó el ‘HMS Tireless’ entre 2000 y 2001, “han pasado más de 100 submarinos y muchos de ellos con problemas”, lo que hizo recordar el submarino nuclear de la Armada Real Británica ‘HMS Ambush’, que colisionó en 2016 con un buque mercante en el mar de Alborán, en el transcurso de unos ejercicios de entrenamiento.
Con ello, Verdemar criticó que “el puerto de Gibraltar se ha convertido en un puerto X, donde el Reino Unido lleva submarinos a reparar, poniendo en riesgo a la población y el medio ambiente. Antes con el diseño de ‘puerto Z’ sólo se hacía cambio de tripulación o avituallamiento”, lamentaron.
Ante esta situación, indicaron que “Gibraltar debe decidir si quiere que su puerto sea un puerto turístico o militar”, pero critican el “silencio” que rodea estos hechos. Por su parte, desde Verdemar-Ecologistas en Acción continúan con la campaña de informar a los pasajeros que llegan a Gibraltar en cruceros porque, aseguran, “están ante un riesgo nuclear”.
Hace unos días la Marina de Estados Unidos desplegó su portaaviones más avanzado, el USS Gerald Ford, un barco de 100 mil toneladas y de propulsión nuclear, equipado con un nuevo tipo de catapulta y diseñado para equiparse con armas de última generación.
El buque de 335 metros, que costó más de 13 mil millones de dólares, partió al mediodía de su puerto base de Norfolk, en el estado de Virginia (este), escoltado por su grupo aeronaval, para varias semanas de maniobras con infantes de marina de nueve países aliados, incluidos Francia y Canadá.
“El USS Gerald Ford está desplegado para ‘demostrar sus capacidades letales sin igual en todas las áreas’”, dijo el almirante Daryl Caudle, comandante de las Fuerzas Navales de Estados Unidos, en un comunicado. Los ejercicios multinacionales en el Atlántico se centrarán en la defensa antiaérea, el combate antisubmarino, las medidas antiminas y las operaciones anfibias, precisó la Marina.
Estos movimientos siguen generando tensiones y hace creer que en cualquier momento alguno de los ejercicios militares pueda salirse de control y generar un conflicto bélico de grandes proporciones.
Fuente: Linda Rodriguez