Los remedios caseros, aunque en ocasiones pueden ayudar a aliviar ciertos síntomas, no sustituyen el tratamiento médico.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), el estreñimiento es una afección en la cual la persona podría tener menos de tres evacuaciones a la semana. Así mismo, las heces se tornan duras, secas o grumosas, dificultando la evacuación.
Como consecuencia de este padecimiento, algunas personas pueden experimentar síntomas adicionales como pesadez, dolor abdominal o sensación de que la evacuación no fue completa.
En primera instancia, el estreñimiento puede ser superado con autocuidado, pero si se convierte en un problema crónico (de larga duración) o aparecen otros síntomas como sangrado en el recto, sangre en las heces y dolor fuerte y continuo en el abdomen, es recomendable acudir a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico preciso y definir el tratamiento adecuado.
Según reseña la enciclopedia médica MedlinePlus, algunas maneras de prevenir el estreñimiento son:
Comer más frutas, verduras y granos (alimentos ricos en fibra).
Beber abundante agua y otros líquidos.
Hacer ejercicio con frecuencia.
Tomarse el tiempo suficiente para evacuar (ir al baño) cuando el cuerpo lo necesite.
Consumir laxantes únicamente bajo prescripción médica.
Infusiones naturales para combatir el estreñimiento
La medicina alternativa ofrece algunas opciones para aliviar el estreñimiento, sin embargo, es pertinente mencionar que los remedios caseros no cuentan con respaldo científico, por lo que su efectividad no está garantizada en un 100 %.
El portal Mejor con Salud comparte algunas infusiones con efectos laxantes que podrían ayudar a aliviar el estreñimiento. Uno de ellos aprovecha las cualidades de la ortiga, una planta cuya ingesta está asociada con estimular la evacuación de las heces.
Ingredientes:
Una taza de agua (250 mililitros).
Una cucharada de ortiga fresca (10 gramos).
Preparación:
Incorporar la ortiga fresca en una taza de agua hirviendo y dejarla reposar hasta que esté tibia.
Colar la infusión y servir.
Beber una taza de esta infusión en ayunas, dos o tres veces a la semana.
Infusión de cilantro
Otra bebida popular para el alivio del estreñimiento es la infusión de cilantro, sin embargo, el citado portal anota que no hay evidencia científica que respalde su efectividad.
Tradicionalmente, el cilantro ha sido usado en la medicina natural dentro de remedios caseros para reducir la inflamación y eliminar los gases.
Ingredientes:
Una cucharada de hojas de cilantro (10 gramos).
Una taza de agua (250 mililitros).
Preparación:
Incorporar la cucharada de hojas de cilantro en una taza de agua hirviendo.
Tapar la taza y esperar a que esté tibia.
Colar y servir.
Esta infusión puede beberse dos veces al día hasta que los síntomas comiencen a desaparecer.
Infusión de semillas de lino
También conocidas como linaza, estas semillas son populares en los remedios caseros para cuidar de la salud digestiva. Mejor con Salud destaca que, gracias a su contenido de fibra insoluble y ácidos grasos, las semillas de lino impulsan la eliminación de los desechos sin dañar la flora bacteriana.
Ingredientes:
Una cucharada de semillas de lino (10 gramos).
Una taza de agua (250 mililitros).
Preparación:
Poner a hervir una taza de agua y, cuando llegue a su punto de ebullición, agregar las semillas de lino.
Tapar el recipiente y dejarlo reposar a temperatura ambiente hasta que se enfríe.
Filtrar el líquido con un colador y servir la bebida.
Esta infusión puede beberse tres veces a la semana. La recomendación es hacerlo en ayunas y repetir su consumo en mitad de la tarde.
Los remedios caseros, al igual que algunos medicamentos, pueden derivar en efectos secundarios o reacciones alérgicas para algunas personas. Por esta razón, es recomendable evitar este tipo de tratamientos en mujeres embarazadas o en lactancia, bebés y niños pequeños.
De igual manera, si el consumo de las infusiones descritas previamente generan reacciones como dolor, diarrea o gases, es conveniente suspender el tratamiento y acudir a un médico de confianza.
Fuente : Semana , Johan López
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