Para prevenir un pie diabético es importante controlar los niveles de azúcar en la sangre.
Las úlceras en el pie diabético son lesiones en forma de llaga, las cuales aparecen por los daños que causa el azúcar alta sobre los vasos, nervios y el tejido epitelial. Esta afección aparece en las personas que sufren de diabetes.
Los principales síntomas que indican que una persona puede tener pie diabético son: la pérdida de la percepción ante estímulos dolorosos, presiones excesivas y cambios de temperatura; atrofia y debilidad de la musculatura de la extremidad inferior, lo que produce deformidades de los pies, aumento de las presiones en determinadas zonas del pie, sequedad de los pies, dejando la piel más frágil, precisa el Instituto de Rehabilitación Funcional La Salle.
Según esta institución, existen algunos factores de riesgo para que una persona pueda desarrollar una úlcera diabética y entre ellos están: úlcera o amputación previa, neuropatías diabéticas, traumatismos como el uso de un calzado inadecuado, caminar descalzo, objetos en el interior del calzado, caídas o accidentes; alteraciones biomecánicas.
A pesar de que no representan mayor molestia, es importante prestarles atención y llevar un tratamiento oportuno con el propósito de prevenir infecciones o un problema mucho más grande.
En ese sentido, el portal Mejor con Salud da a conocer una serie de infusiones naturales que pueden ayudar a su recuperación. No obstante, antes de ponerlas a prueba, la mejor opción es consultar con un profesional de la salud.
Infusión de caléndula
Las flores de la caléndula se caracterizan por sus propiedades antisépticas y antinflamatorias, es decir, que curan las lesiones causas por el pie diabético.
Ingredientes:
Tres cucharadas de flores de caléndula.
Dos tazas de agua.
Preparación:
Hervir las tazas de agua.
En su punto de ebullición agregar las flores de caléndula.
Dejar reposar por 15 minutos.
Verter en un recipiente.
Aplicación:
Sumergir los pies en el recipiente durante 10 minutos.
Repetir el tratamiento cada noche antes de acostarse.
Aloe vera y aceite de árbol de té
Al mezclar el aloe vera y el aceite de árbol de té se obtiene un producto antimicrobiano y antiinflamatorio para permitir el alivio de las úlceras. Su aplicación también ayuda a curar los tejidos lesionados.
Ingredientes:
Cinco cucharadas de gel de aloe vera.
Seis gotas de aceite esencial de árbol de té.
Preparación:
Extraer el gel fresco de sábila.
Mezclarlo con el aceite esencial de árbol de té.
Aplicación:
Lavar los pies, secarlos y aplicar el tratamiento sobre las zonas afectadas.
Dejarlo actuar toda la noche.
Repetir el proceso todos los días.
Sal marina
La sal marina permite acelerar la recuperación de la piel afectada por las úlceras. También ejerce un efecto antiséptico que previene el riesgo de infecciones.
Ingredientes:
Seis cucharadas de sal marina.
Tres tazas de agua.
Preparación:
Verter las tazas de agua en un recipiente.
Agregar las cucharadas de sal marina.
Aplicación:
Sumergir los pies en la infusión.
Dejarlo en remojo durante 15 minutos.
Enjuagar.
Repetir tres veces por semana.
¿Cómo prevenir el pie diabético?
De acuerdo con MedlinePlus, una persona puede ayudar a evitar los problemas en los pies controlando los niveles de azúcar en la sangre, pero también con otras prácticas sencillas a las que se les debe hacer seguimiento diario.
Por ejemplo, revisar y lavar los pies todos los días, mantener la piel humectada y suave, limar los callos y callosidades suavemente, tratar de sentir los pies con las manos, cortarse las uñas de manera regular, usar medias y zapatos en todo momento, proteger los pies del frío y del calor y tratar de mantener una circulación sanguínea indicada en los pies.
De acuerdo con los expertos, en caso de que un paciente observe una úlcera, deberá acudir lo antes posible al especialista. No únicamente para curarla, sino para diagnosticarla y diseñar un tratamiento personalizado que permita hacerle seguimiento y superar las dificultades que esta situación puede generar.
Fuente : Salud , Maria Arias
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