La Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca que comer al menos 400 gramos -o cinco porciones- de frutas al día reduce el riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles.
El comienzo de año suele ser una época en la que muchas personas se preocupan por los kilos que aumentaron tras las festividades. La búsqueda de alimentos que ayudan a reducir de peso se convierte en una prioridad y, en ese sentido, las frutas son un gran aliado.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca que comer al menos 400 gramos -o cinco porciones- de frutas todos los días reduce el riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles y garantiza una ingesta suficiente de fibra dietética. Además, según la Asociación Americana del Corazón, el consumo de frutas provee al cuerpo de vitaminas, minerales, fibra y muchos otros componentes determinantes para el buen funcionamiento del organismo.
Aunque comer todo tipo de frutas es saludable, existen unas cuantas que sirven para reducir de peso. Una de ellas es el kiwi, que tiene un alto contenido de fibra soluble, lo que mejora la digestión y el tránsito intestinal. Por ese motivo es bueno para adelgazar, pues contiene un excelente porcentaje de agua y un nivel calórico intermedio. Sus características son beneficiosas para bajar de peso y se recomienda en las dietas de quienes pretenden iniciar un proceso de adelgazamiento.
El kiwi es rico en vitamina A, C y E, potasio, calcio, cobre y magnesio. Además, tiene muy pocas calorías, aproximadamente 60 por cada 100 gramos.
Cabe destacar que “aquellos que son alérgicos a una enzima llamada proteolítica actidina no deben consumir kiwi. Tampoco los que tienen tendencia a desarrollar cálculos renales (piedras en el riñón). Debido a su contenido en potasio, no se recomienda para los que padecen de insuficiencia renal. Los síntomas por intoxicación pueden derivar en urticaria, problemas para tragar y vómitos”, destacó el medio ABC.
La fresa es otra gran opción para quienes esperan bajar de peso tras el paso de la temporada navideña. Esta fruta contiene pocas calorías y, a su vez, es rica en compuestos bioactivos debido a sus elevados niveles de vitamina C, que proporcionan efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Según el portal Tua Saúde, las fresas son ricas en fibra, ayudando a controlar los niveles de azúcar en la sangre e incrementan la sensación de saciedad, disminuyendo la ingesta calórica.
Por cada 100 gramos de fresas, cerca de 33 gramos aproximadamente son calorías, 5,5% son carbohidratos, 5,4% es fibra y el 2% se ubica con las proteínas, además, tan solo un 0,8% son grasas.
“Las fresas poseen muy pocas calorías y nada de grasas. Cuentan con elevadas cantidades de fibra lo que ayuda a tener una buena digestión y regular el colesterol. Su contenido de vitaminas hacen que posea propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antihipertensivas y antiproliferativas, tal y como muestra un estudio publicado en Critical reviews in food science and nutrition. También aportan las necesidades diarias de vitamina B6 y K, y minerales como el hierro, manganeso, magnesio, y cobre. Las fresas ayudan a reducir los niveles de colesterol malo y previenen la aterosclerosis, por lo que disminuyen el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular o accidente cerebrovascular. Son un alimento que debe incluirse en la alimentación, pero plantear una dieta basada en el consumo exclusivo de las mismas no es adecuado”, apuntó el portal Mejor con salud de AS.
Finalmente, otra fruta beneficiosa para bajar de peso es la piña. Su bajo contenido en calorías y su elevado contenido en agua y fibra provocan una sensación de saciedad. La piña es diurética, por lo que favorece el funcionamiento de los riñones y ayuda a eliminar el exceso de líquidos que se acumulan en el cuerpo. Es depurativa y elimina muchas de las toxinas que se estancan en el organismo. Esta fruta es rica en minerales y vitaminas como la C.
Fuente : El Tiempo , Maria Arias